TU ERES LA CULPABLE

Por quererme tanto, cuando quisiste hacerlo
y lo hiciste con todas tus fuerzas.
Por dejar que tu ser se arraigara profundamente en mi corazón
Por hacerme creer que yo merecía tanto, sin en verdad merecerlo
Por despertar a aquel soñador, que más bien yo creía que estaba muerto
Por tratarme como tu bebe del alma, siendo en realidad un niño malcriado
Por permitir bautizarte y tratarte como mi mamy querida,
¡oh cuanto lo disfrute!.

Si crees que no lo entiendo que por ahora te tengas que alejar de mi, y talvez sea para siempre, te equivocas lo entiendo perfectamente, mi mente lo entiende con toda plenitud y ella te deja libre, pero el que no lo entiende es este tonto corazón que no se consuela con nada ni entiende de razón, ni quiere aceptar, y solo siente soledad melancolía, y tristeza y este ingenuo corazón solo siente un poco de calma y tranquilidad cuando deja salir de dolor lagrimas que a veces logran salir por los ojos, pero que normalmente no logran salir pero que desgarran el alma internamente.

Quisiera prometerte comportarme como es debido, siendo un buen amigo, sin tener que estar fastidiándote, con mis muestras de cariño y afecto, pero no se si lo pueda lograr, quisiera ser aquel amigo que te quería solo como una amiga y una hermana, aun cuando no conocía de tu ternura, perdona que tenga que hacerte que uses tanto tacto conmigo, para no decir las cosas como en realidad las sientes para lograr hacerme entender lo que debe de hacerse.

Sé que mereces más, de lo yo puedo ofrecerte y sé que Dios te lo dará al tiempo debido, solo sigue como eres, siendo UNA GRAN MUJER A LA VISTA DE JEHOVA.